La duración de la estancia en Bali y sus playas depende fundamentalmente de las preferencias y necesidades de cada familia. Sin embargo, en general se recomienda una estancia de al menos 7 a 10 días para tener tiempo suficiente para disfrutar de las maravillosas playas y explorar algunos de los atractivos turísticos de la isla.
Para las familias que deseen una experiencia más relajada y menos apresurada, una estancia de 14 a 20 días puede ser ideal. De esta manera, tendrás tiempo de sobra para disfrutar de las playas, realizar algunas excursiones, conocer la cultura local y simplemente relajarte y disfrutar del entorno tropical.
Al planificar tu estancia, es importante tener en cuenta que Bali es mucho más que solo playas. La isla ofrece una gran variedad de atractivos, como templos antiguos, arrozales, mercados tradicionales y una rica cultura local. Por lo tanto, vale la pena reservar algunos días para explorar estos aspectos de la isla.
En cuanto a las playas, Bali cuenta con una amplia variedad para todos los gustos. Desde playas de arena blanca perfectas para familias y amantes del sol, hasta playas de surf con olas perfectas para los amantes de este deporte. Por lo tanto, es posible que desees dedicar varios días a explorar diferentes playas. ¡La isla también está plagada de cascadas que dejarán boquiabieertos a los más pequeños!