La mejor época para visitar Eslovenia es la primavera, cuando las temperaturas son agradables y los paisajes están llenos de flores. Sin embargo, en verano el país está lleno de gente, lo mejor es evitar esa época si eres alérgico a las multitudes, a menos que quieres relajarte en la costa del Adriático. Si vas a esquiar, escoge los meses de diciembre a marzo. Ve a descubrir los magníficos paisajes de Eslovenia, las famosas estaciones termales o incluso las antiguas cuevas.