Incluso teniendo poca experiencia, la equitación es una actividad apta para todos los públicos en Cuba, incluidos los más pequeños. Podrás visitar la Finca La Guabina cerca de Pinar del Río, al oeste de la isla. En este centro dedicado a la cría de caballos podrás conocer a los guajiros, campesinos cubanos con aires de cowboy, y dar un paseo en un caballo pinto o appaloosa.
Si dejas atrás las casas coloniales de Trinidad, en el centro del país, podrás llegar a caballo hasta el valle de Los Ingenios, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Aquí podrás galopar en una zona antes conocida por su próspera actividad azucarera. En estas zonas verdes repletas de palmeras, podrás hacer un alto para probar el famoso jugo de caña de azúcar o para refrescarte en la piscina natural formada por la cascada de El Pilón.
Si quieres que tu ruta tenga también una dimensión cultural, podrás optar por el parque nacional de Viñales, en la Sierra de los Órganos. Un guía te acompañará a dar un paseo a lomos de un caballo criollo por las plantaciones de tabaco. No dudes en hacer un breve descanso para observar cómo se fabrican los puros. Antes de que el sol se ponga, procura darte un chapuzón en una laguna enclavada en el corazón de los montículos de piedra caliza, los famosos mogotes.