Nepal con niños

La gente de Evaneos en Katmandú es fantástica,especialmente Álvaro que desde el primer momento estuvo muy pendiente de nosotros.Tambien el jefe de la oficina estuvo muy atento a solucionar los problemas que surgieron. Y por supuesto,un 10 a nuestro guía de montaña Fura,un experto alpinista que nos acompañó durante todo el trekking,,atento a nuestras necesidades,a nuestro cansancio;es muy tranquilo pero muy resolutivo ,un verdadero lujo.

Hemos visitado tres paises, Nepal, Tibet y Bután. Cercanos pero distintos. El viaje muy bien organizado, surgieron algunos problemas en el viaje a Tibet que la agencia solucionó de la mejor manera posible. Tanto la agencia en Nepal (que organizó el viaje a Tibet y bután) como Álvaro estuvieron pendientes de nosotros en todo momento y se agradece. Nos han encantado los tres paises. Gente muy amable así como los guías y conductores. En Bután a pesar de pagar la categoría más baja (nos habían comentado que era muy básico) encontramos que los hoteles y comidas eran más que correctos. Hoteles agradables y limpios y comida abundante.

El viaje ha sido estupendo, tanto los guías como el conductor lo han dado todo para que nuestra experiencia en Nepal fuese la mejor. El plan que se preparó conuntamente con el contacto de Evaneos se ajustó bastante a lo que hicimos y las modificaciones que se hicieron sobre la marcha resultaron acertadas. Solo tengo un comentario negativo acerca de la agencia y el contacto de Evaneos: Antes de viajar a Nepal se te envía un documento con instrucciones para encontrarte con tu guía en el aeropuerto de Kathmandú, en ese documento dice que al final del pasillo, en la zona de ascensores y escaleras, debes subir un piso. Debería decir que hay que BAJAR un nivel para encontrate con el guía. Al llegar a la sala de espera, el contacto no estaba esperándonos, y fuera de la terminal tampoco. Opté por llamar a Alvaro, el contacto de Evaneos y la persona con la que preparas el itinerario. No fue de mucha ayuda ya que él sugirió escribir un whatsapp a la persona que debía esperarnos en lugar de llamarle por teléfono para saber porqué no estaba esperándonos. Después de un rato sin saber qué hacer, volví a llamar a Alvaro. Siguió siendo en balde ya que no había llamado al contacto de Nepal, pero lo peor de todo fue que empezó a cuestionarse porqué nos había llevado 1h y media salir de aeropuerto cuando, según él, el proceso lleva 1h. Obviamente el tiempo que tardas en salir depende de la cantidad de gente que encuentras en los varios controles que hay para salir de la terminal. Todos estos controles más la compra de la tarjeta SIM fue lo que hizo que nos retrasásemos 30 minutos, pero en mi opinión el contacto de Evaneos debe ayudarte a encontrar a tu guía en lugar de culparte por salir tarde, a mi modo de ver. Finalmente una persona en la terminal que se percató de nuestra situación consiguió ponernos en contacto con Devi, la persona que debía ir a recogernos y pudimos salir de allí. Quizá sea una situación aislada la mia, pero no quería dejar de contar mi experiencia.