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El clima de Tanzania en noviembre es muy agradable, con una temperatura media máxima de 28ºC y una media mínima de 16ºC. Las lluvias durante este mes son esporádicas y duran generalmente muy poco tiempo, pero que hacen que el paisaje seco que hasta ahora se podía contemplar en este país, se convierta en un espacio verde y frondoso.
Si te gustan los safaris, una visita al parque nacional de Seregenti en noviembre es una de las mejores decisiones que puedes tomar. No en vano los movimientos migratorios en este mes se encuentran en pleno apogeo ofreciendo un espectáculo único en el que los ñus y las cebras corren en busca de un mejor lugar donde habitar. En el norte de este parque durante noviembre, también vas a poder contemplar hipopótamos, gacelas de Thomson y jirafas, donde también conviven con los cuatro carnívoros más importantes de este lugar como son el león, el guepardo, la hiena y el leopardo, aunque el mayor número de animales de estas últimas especies se encuentran en el área central del Seregenti.
Ten en cuenta que en el interior del país, el clima es tropical y templado, mientras que la costa es muy húmeda y puede hacer mucho calor, a veces demasiado. La mejor época para viajar a Tanzania es durante la temporada seca, que va de mayo a octubre. Si quieres evitar la temporada de lluvias (que va de marzo a principios de mayo), pero quieres viajar sin preocupaciones fuera de temporada, te aconsejamos viajar desde principios de noviembre hasta mediados de diciembre: hay menos viajeros y los colores son sublimes.
Esta elección también depende de la actividad que desees realizar: viaja en la temporada seca si quieres hacer un safari en la mayoría de los parques, pero elige la temporada de lluvias si lo que buscas es ver cebras y ñus en el Serengeti, en lugar de leones y otros depredadores. Por último, si no toleras bien el calor, evita los meses de enero y febrero, los más calurosos del año.